Un fluido se define como una sustancia que cambia su forma continuamente siempre que esté sometida a un esfuerzo cortante, sin importar qué tan pequeño sea.1
Un fluido puede definirse como una sustancia que no
resiste, de manera permanente, la deformación causada por una fuerza y, por
tanto, cambia de forma. En este texto se considera que los gases, líquidos y
vapores tienen las características de fluidos y que obedecen a muchas leyes
comunes.2
Los fluidos son sustancias capaces de “fluir” y que se
adaptan a la forma de los recipientes que los contienen. Cuando están en
equilibrio, los fluidos no pueden soportar fuerzas tangenciales o cortantes.
Todos los fluidos son compresibles en cierto grado y ofrecen poca resistencia a
los cambios de forma.3
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Irving H. Shames. 1995. Mecánica de Fluidos. Tercera
edición. Editorial Mcgraw-Hill. Bogota-Colombia. 850p.
2. C.J. GEANKOPLIS. 1998. Procesos de Transporte y Operaciones
Unitarias. Tercera edición. Editorial Continental. México. 1024p.
3. RANALD V. GILES. Mecánica de los Fluidos e Hidráulica.
Editorial Mcgraw-hill. 280p.